La ciudad imaginada: el paisaje neoclásico de Guadalajara y sus productores

Luis Felipe Cabrales Barajas

Resumen

En el texto se aborda una aproximación al proceso de construcción social del imaginario urbano de Guadalajara durante el siglo XIX, éste se caracteriza por el privilegio de obras arquitectónicas neoclásicas que conformaron un valor paisajístico institucionalizado que se apoyó en la reiteración de representaciones de edificios como el Hospicio Cabañas y el Teatro Degollado.

El análisis contempla la articulación entre las dimensiones material y simbólica. Se da seguimiento a una cadena de conocimiento de raíz novohispana que cultivó ideas ilustradas que arrancaron con la llegada del arquitecto José Gutiérrez a Guadalajara y posteriormente se concatenó con la inteligencia local personificada por Manuel Gómez Ibarra, Jacobo Gálvez y David Bravo, gracias a la existencia del Instituto de Ciencias de Jalisco y la Sociedad de Ingenieros de Jalisco.

La lectura del imaginario se vale del recurso de las representaciones gráficas y literarias: para tal efecto se utilizaron principalmente la hoja “Guadalajara” publicada en 1887 en la revista La Ilustración Española y Americana y los relatos del viajero Eduardo Gibbon plasmados en su libro Guadalajara (La Florencia Mexicana), editado en 1893.

 

Palabras clave

Guadalajara; imaginario urbano; arquitectura neoclásica; representaciones de paisaje
Texto completo: PDF HTML

Herramientas del artículo

Envíe este artículo por correo electrónico (Inicie sesión)
Enviar un correo electrónico al autor/a (Inicie sesión)

Estadísticas del artículo

vistas descargas
anual histórico
vistas 5 1893
descargas 9 5530